Dotamos nuestras instalaciones de condiciones óptimas de calidad del aire y confort para nuestra plantilla
GRUPO KURSAAL en nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, nos ponemos manos a la obra con el cumplimiento de los ODS 3 y 11; “salud y bienestar” y “ciudades y comunidades sostenibles”, respectivamente.
Espacios monitorizados
En concreto, hemos llevado a cabo el análisis de las condiciones interiores y mejora de nuestras instalaciones.
En primer lugar, mediante un proceso de monitorización con la plataforma NEOS, hemos estudiado las condiciones higrotérmicas de los espacios, analizando la temperatura y humedad relativa durante la jornada laboral. También, se ha analizado la calidad del aire, atendiendo a la concentración de CO₂, así como el contenido de COVs (Compuesto Orgánico Volátil) en el ambiente.
El objetivo de esta monitorización ha consistido en crear un análisis del confort y calidad del aire interior, para posteriormente, plantear las medidas de mejora necesarias.
Instalación de recuperador de calor
Las estrategias fijadas tras la monitorización han pasado por la instalación de un sistema de ventilación mecánica forzada con un recuperador de calor entálpico.
Con este sistema se ha conseguido mantener una ventilación continua de los espacios, garantizando unas condiciones óptimas de calidad del aire. Gracias a su funcionamiento de retirar aire viciado e introducir aire exterior previamente filtrado y atemperado, se ha conseguido reducir los niveles de CO₂ presentes en el ambiente, recuperando una gran cantidad del aire extraído. Además, se ha conseguido regular la humedad de las estancias, evitando una gran sequedad de aire o excesiva humedad en invierno y verano.
Con todo ello, hemos logrado que las oficinas estén constantemente ventiladas, reforzando la calidad del aire interior y reduciendo el consumo energético de calefacción. Todo esto, a la vez que garantizamos condiciones óptimas de confort para los trabajadores/as.
Contar en nuestras oficinas con un recuperador de calor, ha dotado a las instalaciones de una excelente calidad del aire. También, ha contribuido a un menor consumo y gasto, beneficiándonos por tanto en un ahorro de energía y sostenibilidad para el entorno.
Como prueba de ello, a continuación, se presentan 2 gráficos. El primero muestra los niveles de CO₂ antes de la instalación del recuperador de calor:
Y el segundo muestra los valores de CO₂ después de la instalación, donde es visible una mejora de hasta el 50%:
Tanto es así, que la mayor parte de la jornada laboral la concentración de CO₂ se mantiene en rangos óptimos.
En la actualidad, el sistema de monitorización sigue en marcha y se emplea como método de control y seguimiento de los valores de confort y calidad del aire. Nos ayudará a localizar picos altos de concentración de CO₂ y actuar mejorando la estrategia de ventilación fijada.
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